Respecto a este esquicio, debo decir que lo disfrute bastante. Solo el hecho de armar una maqueta es un desafio, calcular la escala, como representar el lugar de mi compañera sin conocerlo en persona, los colores, el espacio. A medida que lo íbamos armando se nos hacia mas clara la idea de como lo queríamos hacer. Lo que me sorprendió y me gusto fue el momento de iluminar el lugar, jugar con las luces, las sombras, distintos ángulos con respecto a la posición de las luces, cambiar el balance de blancos, los lentes. Variaba completamente el lugar con solo intercambiar algunas de esas variantes.
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